COBARDE ofensiva. Escalada de violencia en La Joya incluyó, además del ataque a la comisaría, el secuestro de un policía, liberado después.
Policías de la comisaría El Triunfo resistieron desde las dos de la tarde de ayer el ataque incontrolable de más de 500 personas, que, tras lanzar centenares de piedras a la instalación policial, intentaron tomar la dependencia y prenderle fuego.
Bajo el argumento irracional de la protesta, otra dependencia policial fue blanco de los ataques de extremistas. Policías de la comisaría El Triunfo, en el distrito arequipeño de La Joya, resistieron desde las dos de la tarde de ayer el ataque incontrolable de más de 500 personas, que, tras lanzar centenares de piedras a la instalación policial, intentaron tomar la dependencia y prenderle fuego. En lo que va de las protestas, nueve comisarías han sido atacadas en el país.
El gobernador regional Rohel Sánchez informó que habían 12 personas heridas, mientras que el Ministerio del Interior confirmó que un agente policial había sido retenido por los vándalos. Horas después, tras una negociación, el agente fue liberado.
Un grupo de 200 personas había llegado hasta la sede policial para exigir la liberación de un ciudadano, intervenido horas antes durante un operativo en el sector El Cruce, donde se pretendía liberar un tramo de la Panamericana Sur.
Otro grupo de más de 300 personas, que habría llegado armado, se sumó luego a los violentistas. Imágenes difundidas en un video muestran que los extremistas lanzaron bombas molotov hacia donde se encontraban policías y militares que acudieron en apoyo.
Fuentes policiales de esa ciudad señalaron que la llegada de la turba tenía como principal objetivo incendiar la comisaría, pues en un momento de los enfrentamientos llegaron a rociar gasolina en una de las paredes.
EL FUEGO ES SU DIVISA
Mientras tanto, la extrema violencia se mantiene indetenible en Puno. Los actos de terror se trasladaron a la provincia de Yunguyo, donde una turba atacó la comisaría e incendió el puesto de vigilancia de fronteras y los locales de la Sunat, Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) y Migraciones.
FUENTE: PERU21